Artículo escrito por la psicóloga Nancy Marchán
Durante las diferentes etapas de nuestra vida vamos aprendiendo estrategias que nos permiten afrontar las diferentes situaciones que se nos presentan. Realizamos ajustes en función de lo que logramos y consolidamos aquellas fortalezas que nos orientan al éxito en los distintos ámbitos de nuestra vida. Sin embargo, a veces se nos presentan situaciones en las que sentimos que no logramos resolver bien lo que sucede, porque nos desbordan emocionalmente, porque necesitamos orientación para tomar la decisión más adecuada o porque nos sentimos estancados y deseamos contar con herramientas para mejorar nuestras habilidades de afrontamiento.
Conviene asistir con un psicólogo en esos momentos donde sientes que lo que está sucediendo te desborda, donde sientes que lo que te sucede te genera malestar emocional, que no sabes cómo afrontarlo, que sientes que la situación que vives excede tu capacidad pararesponder adecuadamente y comienza a afectar tu desenvolvimiento en las diferentes áreas vitales, porque sientes que afecta la forma de comportarte en el trabajo, en tu dinámica familiar, con tu pareja, con amigos, o la forma como te desenvuelves en lo cotidiano. Lloras fácilmente, estás irritable, te molestas al punto de gritar y pelear constantemente, no puedes dormir bien, tienes dolores de cabeza frecuentes o malestar general de salud, cambia tu apetito bien sea porque comes más o comes menos, aumentas hábitos como fumar, beber alcohol, usas medicamentos para calmarte o usas drogas. Frente a estas situaciones tus acciones te están diciendo que necesitas ayuda, escucha tu cuerpo, busca ayuda de un profesional de la salud mental.
A veces es difícil asistir a terapia porque significa afrontar miedos, ansiedades, creencias que no sabemos cómo abordar y es justamente el espacio que nos puede permitir gestionar lo que sentimos, procurando lograr el bienestar emocional. Es importante que sepas que, durante la terapia psicológica una de las herramientas que utilizamos es la psicoeducación, que significa dar información y educación acerca de lo que le sucede a la persona. Por ejemplo, si estás pasando por un episodio depresivo, la psicoeducación permite la comprensión de lo que es la depresión, cuáles son los síntomas, cómo identificar las causas y las formas de afrontarla, por supuesto revisando cada caso para adecuar el tratamiento terapéutico según convenga. Incluso la psicoeducación puede hacerse extensiva a la familia, ya que hay casos en los que el pronóstico de mejora depende del apoyo familiar.
Igualmente es recomendable buscar orientación de un psicólogo cuando sientas la necesidad de lograr un cambio personal o si quieres trabajar para mejorar tus habilidades personales. Los psicólogos orientamos a las personas para que logren mejorar la forma como se sienten emocionalmente.
Si necesitas orientación para mejorar tu calidad de vida ¡Hablemos!